¿Cómo evolucionó el urbanismo de Santa Cruz de la Sierra?
Siglos XVI-XIX
La ciudad de Santa Cruz de la Sierra fue fundada el 26 de febrero de 1561 por Ñuflo de Chávez, sufrió varios traslados debido a la constante amenaza de las culturas aborígenes; su establecimiento fue consecuencia de las expediciones que partieron desde Asunción a Lima en búsqueda del mítico “Dorado”, asimismo para establecer una base para futuras excursiones y para la evangelización de los diversos pueblos nativos asentados en la zona, como los chiquitanos, chiriguanos, yuracarés y chanés.
Como las demás ciudades españolas fundadas en Hispanoamérica, la planificación urbana siguió el modelo de plano en cuadrícula con una plaza central que englobaba a los edificios administrativos de la ciudad -como el Cabildo y la iglesia matriz- además, las casas de personajes importantes que contribuyeron a la fundación de la ciudad.
Santa Cruz se asentó en un entorno de llanos tropicales, geográficamente ubicada en el este de la actual Bolivia, a 400 metros sobre el nivel del mar; durante el período colonial se limitó a ser un centro de frontera y expediciones que fundaron las misiones jesuíticas en los alrededores, así como un centro de vigilancia ante la constante expansión territorial de la corona portuguesa mediante su colonia del Brasil.
La inexistencia de actividad minera hizo que la ciudad no se destacara a nivel económico ni comercial, como fue el caso de las ciudades y villas del oeste; su crecimiento se vio limitado, además, por el factor climático que facilitaba la expansión de epidemias, la ciudad tuvo un incipiente desarrollo que se limitó a la agricultura.
El viajero francés Alcides D’Orbigny -en su viaje por Sudamérica en el siglo XIX- brindó algunos detalles sobre el aspecto de la plaza principal de la ciudad: “La plaza era un simple campo verde, tal como lo vio D'Orbigny a principios del siglo XIX. Las calles, seguramente, todavía no eran evidentes, y su reconocimiento solo era posible por la inexistencia de árboles y la ubicación paralela de las pocas viviendas levantadas” (Bonino, 2014: 6).
Tras la independencia de Bolivia, la ciudad de Santa Cruz de la Sierra se mantuvo como una ciudad desconectada de las ciudades principales del país que se movían en torno a la explotación minera de la plata; la falta de caminos y su lejanía con los centros de producción nacional frenaron su desarrollo.
Santa Cruz de la Sierra en el siglo XX
Desde fines del siglo XIX se produjo el denominado auge del caucho o la goma en la parte norte[1] amazónica de Bolivia, Brasil y Perú, muchas empresas particulares bolivianas que se dedicaban a la explotación del caucho establecieron sus oficinas en la ciudad de Santa Cruz, debido a que presentaba una mejor conexión vial que tampoco fue de las mejores, pero que resultaba más conveniente.
“El período que va desde 1880 hasta 1910 fue el único gran impulso que conoció la ciudad hasta ese momento, época en la que se produjo una intensa explotación de los recursos naturales, que se dio en llamar el “auge de la goma” y que duró, prácticamente, tres décadas. Pero, la caída de la goma deja a la región nuevamente en la pobreza, pues esos recursos no se invierten para crear nuevas actividades productivas. Las utilidades producidas no se transformaron en capital, sino que se derrocharon y encargaron al comercio de importaciones suntuarias o edificaciones fastuosas. Los grandes capitales amasados en ese período fueron a parar, directa o indirectamente, a Europa” (Mazoni, 2005: 138).
Santa Cruz se mantuvo como una ciudad periférica de Bolivia desde el período colonial hasta bien entrado el siglo XX, cuando la ciudad tuvo otro impulso de crecimiento con el inicio de la Guerra del Chaco en el año 1932, esta contienda bélica enfrentó a Bolivia con el país vecino Paraguay, debido a la supuesta existencia de petróleo en la zona denominada Chaco Boreal, al sureste de Bolivia. Santa Cruz se convirtió en centro logístico de operaciones por su cercanía al Chaco, y pudo tomar relevancia -al menos- por lo que duró el conflicto hasta el año 1935.
Durante la primera mitad del siglo XX, las calles de la ciudad eran -en su mayoría- de tierra, con la existencia de arenales en los alrededores, el medio de transporte más utilizado fue el de los carretones tirados por vacas; la extensión de la ciudad era casi la misma que tuvo durante el período colonial, se siguió con el trazado cuadricular de calles, y la plaza principal fungió como el centro de poder de la ciudad.
El Plan Bohan y Techint
El futuro de la ciudad de Santa Cruz cambió hacia mediados del siglo XX, cuando el Gobierno de Estados Unidos enfocó su mirada en el oriente de Bolivia, la capacidad productiva en cuanto a agricultura llamó la atención en su Gabinete y se presentó al gobierno boliviano el denominado plan Bohan, elaborado por Marvin Bohan: “El 15 de agosto de 1941, el señor Bohan remitió su informe final a la Secretaría de Estado, esbozando un programa de desarrollo que consistía en tres componentes mayores” (Fundación Mileno, 2015: 280).
Los tres componentes del plan Bohan hacían referencia a la creación de carreteras que unieran los centros productivos con Santa Cruz y las principales ciudades del país, también, la estimulación de la producción agrícola a gran escala y -finalmente- alentar la producción de goma y quina, entre otros, para su exportación a Estados Unidos, debido a su escasez en el contexto de la Segunda Guerra Mundial.
En 1942 llegó a Bolivia Marvin Bohan, al año siguiente presenta su informe al gobierno boliviano de Enrique Peñaranda, el cual dio el visto bueno y los resultados se reflejaron en la creación de instituciones que pusieron en marcha el plan Bohan: “(…) el gobierno creó en 1942 la Corporación Boliviana de Fomento (CBF), cuyo objetivo era impulsar el desarrollo agroindustrial del país, que incluía la construcción de ingenios azucareros. Creó el Banco Agrícola para abrir una línea de crédito a un potencial sector agroindustrial e inició -en 1943- la construcción de la carretera Cochabamba-Santa Cruz” (Viejo orden o revolución, en: https://www.educa.com.bo/1936-1952-viejo-orden/el-plan-bohan).
Este plan resultó importante y novedoso para el país debido a que se dejó de priorizar la explotación minera monoproductora que se centraba en el occidente de Bolivia, para dar protagonismo al desarrollo agrícola del oriente -que se encontraba, en ese entonces, casi sin intervención- y a la existencia de grandes terrenos para la producción de ingenios azucareros y productos agrícolas; además, la cercanía a Brasil y Argentina mediante la conexión de futuras carreteras y vías férreas contempladas en la potenciación de Santa Cruz de la Sierra como epicentro productivo e industrial.
Para el año 1957 se terminó de asfaltar la carretera que conectaba a Santa Cruz de la Sierra con la ciudad de Cochabamba (ubicada al centro del país), con la cual se integraba a la red vial principal del país, y que se conectaba con Chile a los puertos del Pacífico; también se terminó de construir la carretera al Norte, para integrar a las poblaciones existentes con gran potencial agrícola y ganadero a la ciudad de Santa Cruz.
El plan Bohan alentó la denominada Marcha al Oriente, que pretendió alentar a fijar la mirada en el oriente de Bolivia, creando en Santa Cruz de la Sierra un nuevo polo económico con diversificación económica, estas medidas formaron parte de una política nacional que siguió en marcha hasta mediados del siglo XX y que actualmente persiste con modificaciones.
Otro plan de desarrollo en el plano urbanístico fue el Plan Techint. En el año 1959 se realizó una convocatoria internacional para la realización de un plan regulador de la ciudad, la empresa ítalo-brasileña Techint fue la ganadora “…propuso, para la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, un futuro desarrollo urbano definido por una estructura de vías radioconcéntrica, insertando, en las áreas de expansión, el concepto de unidad vecinal. En ningún momento toma en cuenta el damero colonial existente, simplemente lo envuelve dentro de un primer anillo, y a partir de ahí desarrolla el nuevo trazado (Mazoni, 2005: 141).
El plan concibió la creación de anillos de circunvalación que rodeen la ciudad y alberguen a aproximadamente 600000 habitantes, para esos años, mediados de la década de 1950, la ciudad contaba con, aproximadamente, 50000 habitantes, por lo que el plan pareció tener un futuro a largo plazo, sin embargo, a fines de siglo la ciudad llegó al millón de habitantes.
La implementación del Plan Techint con sus modificaciones posteriores hizo que la ciudad de Santa Cruz de la Sierra modificara su trazado urbano de cuadrícula por uno radial, a su vez el concepto de ciudad jardín fue ampliamente tomado, las residencias ubicadas en el segundo anillo que rodeaba al casco viejo debían contar con un jardín exterior y anchas veredas. A partir de estos planes -Bohan y Techint- la ciudad comenzó su expansión urbana y se consolidó como una de las ciudades más importantes de Bolivia formando parte del denominado “eje troncal”, conformado por tres ciudades: La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.
Santa Cruz de la Sierra, el motor de Bolivia
Desde fines del siglo XX, la ciudad de Santa Cruz de la Sierra se constituyó en el eje productivo y económico de Bolivia, cuenta con el mayor número de industrias del país, actualmente es una de las ciudades que más crece a nivel mundial y la primera en Bolivia, el área metropolitana tiene 1.590 km² de extensión y su población es de
1,450,680 habitantes. Cuenta con la mayor industria manufacturera del país, exporta en gran cantidad la soya y la carne vacuna.
Actualmente están en desarrollo de proyectos inmobiliarios de magnitud, como hoteles de cadenas internacionales: Wyndham, Hilton, Radisson, Marriott, etc. Grandes condominios resort como: Mar Adentro, Urubó Village, Puerto Esmeralda, Playa Turquesa -con una laguna de 13 hectáreas aptas para la navegación de botes y windsurf.
Vista del barrio Equipetrol, corazón financiero de la ciudad
El barrio de Equipetrol Norte se constituyó como el downtown, ya que alberga varios edificios de negocios y centros de convenciones, hoteles y centros comerciales, la ciudad es conocida como hogar de las franquicias internacionales en Bolivia al ser sede de muchas transnacionales, entre ellas, Nestlé. Debido a su ubicación geográfica se encuentra enlazada por tren con Brasil y Argentina, y para su mejor vinculación con el mundo, la ciudad apunta a transformar su aeropuerto internacional de Viru Viru en un hub dentro de Sudamérica, ya que cuenta con el mayor tráfico aéreo de Bolivia.
El desarrollo urbano de la ciudad -desde su fundación hasta bien entrado el siglo XX- fue muy lento, con pequeños períodos de auge a principios del siglo XX. A partir de la década de 1950, la ciudad comenzó a urbanizarse y planificarse, la ayuda de políticas nacionales según recomendaciones del apoyo estadounidense -con el plan Bohan y las reformas urbanas Techint, unidas a la liberación de las exportaciones de soya, granos y azúcar- lograron que la ciudad creciera a un ritmo nunca antes visto y que llegara a convertirse en la ciudad más grande en extensión y población de toda Bolivia.
Duabitad más que arquitectura y diseño
Las opiniones plasmadas en este artículo corresponden enteramente al autor del mismo, no representa la opinión de la empresa.